lunes, 1 de agosto de 2011

El legado de Aleixandre, para los Bousoño

La justicia da otra vez la razón a la familia Bousoño en el caso del archivo de Vicente Aleixandre, después de paralizar, hace cuatro años, el proceso de venta de este legado a la Diputación de Málaga. La Audiencia Provincial de Madrid desestimó ayer el recurso presentado por Amaya Aleixandre, sobrina del premio Nobel de Literatura, contra la adquisición de este material por parte de Carlos Bousoño, a quien Aleixandre cedió el archivo antes de morir.

La Audiencia considera probado que el matrimonio formado por Carlos y Ruth Bousoño es el dueño legítimo de un archivo en el que se encuentran la mayor parte de sus manuscritos poéticos, bastantes de los que escribió en prosa, numerosas cartas que le enviaban otros escritores y la biblioteca personal -acumulada tras perder su colección de libros en la guerra civil-. Además, el legado incluye la máscara mortuoria del poeta, el capote que siempre le acompañó, sus gafas, su agenda, varios títulos académicos y algunas pinturas.

El matrimonio Bousoño manifestó ayer a LA VOZ que la sentencia “está muy bien fraguada jurídicamente” y “no deja ni un solo punto sin resolver”, todo ello teniendo en cuenta la labor de documentación realizada por los tres magistrados que han intervenido en el proceso, ya que, como recuerdan, “no existe casi jurisprudencia sobre los archivos personales”.

Venta a la Junta de Andalucía Carlos y Ruth Bousoño habían acordado la venta del archivo con la Diputación de Málaga y la Junta de Andalucía, pero cinco días antes de que se hiciera efectiva -el precio fijado fueron cinco millones de euros-, un auto suspendió la venta. El auto que puso fin a esas medidas cautelares, indicó ayer Ruth Bousoño, ha sentado las bases para la nueva sentencia. “Han utilizado una parte de aquel auto para dejar muy claro qué es una archivo personal”, señaló. Tanto el poeta asturiano como su esposa siguen teniendo intención de vender y, por las noticias que tienen, la Junta de Andalucía también sigue postulándose como compradora.

Contra la sentencia cabe recurso de casación y también uno extraordinario por infracción procesal, aunque el hecho de que en el recurso anterior no se cuantificara el valor del legado -para el que ya había acuerdo de venta- podría impedir el recurso en el Supremo. Para saber si el litigio ha finalizado o no habrá que esperar a que concluya el verano.

La sobrina, indignada La sobrina del poeta sevillano y demandante, Amaya Aleixandre, manifestó ayer su indignación por la decisión anunciada por la Audiencia Provincial de Madrid.

Según declaró, ni los abogados que la representan en el litigio ni ella misma están “en modo alguno de acuerdo” con el contenido de la sentencia, contra la que se presentará un recurso de casación ante el Tribunal Supremo, anunció tras asegurar que las pruebas que se han presentado “no se valoran”.